Según reveló ayer en una rueda de prensa Arantza Alberdi, integrante de Seiasle, el objetivo de la cita es "que cada persona compita consigo mismo y no con el de al lado", y que el festival se convierta en "una bonita experiencia" donde reine el "buen ambiente". Alberdi, que estuvo acompañada por la también miembro de Seiasle, Tere Laspiur,recordó que los jóvenes pianistas saben ya desde octubre qué pieza interpretarán en el festival, pues ellos mismos se encargaron de escogerla. Serán composiciones breves, algunas de ellas de autores clásicos, y tendrán poco tiempo de demostrar su destreza al piano.
Hay, según destacaron, dos modalidades, solistas y cuatro manos, que a su vez, están divididas en tres categorías en función de la edad: la A (hasta los 11 años cumplidos en 2008), la B (hasta los 14) y la C (hasta los 18). A modo de anécdota, señalaron que el participante más joven es un niño de cinco años, hijo de la pianista de Legazpi, Marta Zabaleta.
clausura Aunque los responsables del festival dejaron claro que habrá medallas para todos los participantes, los doce profesores de piano que componen el jurado subrayarán la labor de quienes hayan destacado más en cada modalidad y categoría. Todos protagonizarán un pequeño concierto de clausura el domingo a las 18.30 horas tras el cual se dará por concluida la cita hasta el próximo año.
El elevado número de participantes de la presente edición demuestra el éxito de una cita en cuya primera convocatoria tocaron poco más de 400 pianistas. Las integrantes de Seiasle insinuaron ayer que no podrán crecer mucho más por cuestiones organizativas y de espacio, pero se mostraron convencidas de que el festival ha demostrado que este tipo de citas eran necesarias.